Bogotá, junio de 2023- Todo proceso de combustión en el motor produce unas partículas minúsculas que son residuos que se depositan en la cámara de combustión, inyectores y válvulas. Estas fallas en dicho sistema de los vehículos se pueden prevenir con medidas que mejoran el buen funcionamiento de estos y, sobre todo, un considerable ahorro en gastos de mantenimiento y en el rendimiento de la gasolina, que por estos días ha tenido alzas considerables en su precio en todo el país.
Una forma de prevenir fallas en el motor y de ahorrar dinero en motores que usan combustible a gasolina, es usar aditivos técnicos, ante los beneficios que otorgan como potenciar la combustión, tener un sistema limpio y la permanencia de la lubricación de los inyectores, así como con la inhibición de la corrosión de la planta motriz.
De acuerdo con lo indicado por la marca alemana Liqui-Moly, los aditivos se dividen en:
- Aquellos aditivos técnicos encargados de la protección y la limpieza de los componentes vitales, como los inyectores, las válvulas y la cámara de combustión, los cuales incluso evitan la corrosión interna del sistema.
- Están los aditivos técnicos que ayudan a mejorar y potenciar la gasolina, como es el caso Octane Plus y el Speed Tec, que ayuda a elevar el octanaje, o a mejorar molecularmente la gasolina respectivamente, ante la combinación de principios activos automezclantes, formulados según la última generación de tecnología de aditivos y combustibles.
- El tercer grupo de aditivos se encarga de la protección del medio ambiente al limpiar y proteger el sistema del catalizador, al ser un estabilizante de la gasolina, evitando que esta se descomponga.
Para el caso del Octane Plus, si se tiene en cuenta que hoy en promedio llenar un tanque de 13,2 galones con gasolina extra cuesta aproximadamente $277.200, usando este tipo de productos (el cual aumenta el octanaje de la gasolina corriente) el ahorro por tanqueada puede llegar a ser de un 22%; en vehículos con mayor capacidad en el tanque, el ahorro puede ser superior.
Con el uso del Speed Tec, un vehículo con la misma capacidad de galones en el tanque, pero que utilice gasolina corriente, permite un mayor kilometraje por cada galón, de tal manera, que el ahorro generado compense el costo del aditivo agregado. El ahorro de combustible puede ser del 22% aproximadamente.
Según el director técnico de la compañía Liqui Moly en Colombia, Jairo Garzón, “gracias al aumento de octanos que ofrece el Octane Plus, se evitan daños del motor causados por combustiones detonantes”
Además, enfatiza en “que la elección de un elevador de octanaje hace que el vehículo funcione mejor y, para mayor efectividad, es recomendable adicionar un mejorador molecular del combustible, como es el caso de Speed Tec, el cual ayuda a mejorar la aceleración y a que el elevador de octanaje funcione al máximo para así obtener un considerable ahorro de combustible”.
Hay que prestar especial atención a qué vehículos debe utilizar el aumentador de octanaje. Los que son de gama media o alta, o los turbos cargados, con índice de compresión elevada requieren gasolina extra porque están diseñados para trabajar con combustible de alto octanaje.
De igual manera se debe entender “que una gasolina de mayor octanaje no produce más energía al incendiarse, simplemente, retrasa el punto en el que se puede prender por el efecto de la compresión”, señala Garzón.
Sobre si otro tipo de vehículos debe usar aditivos para elevar el octanaje, es recomendable revisar el manual porque allí se indica la medida de octanos que requiere en particular teniendo en cuenta la marca y la línea.
Sobre el uso adecuado de aditivos, el Director técnico de Liqui Moly recomienda que “en el caso del Speed Tec, debe adicionarse a la gasolina corriente al momento del tanqueo, con el fin de aprovechar la totalidad del combustible. Hacer el recorrido y cuando se tenga ½ medio tanque, llenar nuevamente. Luego de esto, se debe esperar a tener el tanque casi vacío para volver a agregar el aditivo y volver a aprovechar el beneficio del mayor rendimiento por galón”.
Fallas comunes en el sistema de combustión
Es clave conocer las fallas más comunes en el sistema de combustión como son encontrar inyectores de gasolina sucios o tapados, lo que provoca deficiencias en la dosificación del combustible aumentando su consumo; además de las dificultades al acelerar el vehículo e incluso imposibilidad de moverlo.
Otra falla en el sistema de combustión es la aparición de carbonilla acumulada en las válvulas del motor y en la cámara de combustión que provocan pérdida de potencia, gases más contaminantes y humos negros.
“Esta carbonilla se va acumulando rápidamente en el motor y en las piezas involucradas en el proceso de combustión y evacuación creando obstrucciones, fallas difíciles de detectar, de resolver y muy a menudo costosas averías”, dijo Jairo Garzón.
Otra deficiencia es la presencia de filtros de gasolina tapados y piezas internas como reguladores de presión y bombas de gasolina descompuestas, debido a la presencia de oxidación interna y otras impurezas presentes en el combustible, sin dejar de lado que se pueden encontrar desperfectos en componentes encargados de eliminar sustancias nocivas al medio ambiente.
En el vehículo, la gasolina es un líquido vital y el sistema que la distribuye debe siempre estar en óptimas condiciones para que el automotor no falle. El sistema de combustible debe tener la presión siempre correcta, los filtros estar limpios y todos los demás elementos funcionando de forma correcta.